lunes, 28 de octubre de 2013

UNA BUENA OBRA DE TEATRO .




Sorpresa, me encuentro un  sobre enorme en mi buzón con una Invitación y una nota:
Me han invitado  pero, no puedo asistir y me gustaría que tu ocupases mi lugar, tómalo como un regalo, sé que te gustara.
La intriga me corroe, de quien es? lo imagino, mi nuevo amigo de puerta,miro de que se trata, una entrada para una obra de teatro para esa misma tarde a las 8.
Llamo a su puerta, necesito mas información.
Se asoma con solo su pantalón y mirándome  de esa forma que hace que mi temperatura se eleve sin remedio.
- De que va esto? y le muestro el sobre.
Él se ríe y me explica que su hermano llega esa tarde con la gran ilusión de ir los dos a ver la obra, pero que le ha surgido un trabajo y que supuso que yo podría hacerle ese favor, que me promete 
 sera compensado.
- Cuando llega tu hermano?
- Media hora antes del comienzo de la obra, le diré que le esperaras en ese pub , que hay al lado del  teatro y que iras vestida de negro,
 no tengas miedo que te encontrara seguro.
Esto acompañado de su guiño y con la puerta en mis narices.

A las siete y media estoy sentada en una mesa con mi vaso de Tequila y esperando, llamando la atención de casi todo aquel que esta a mi alrededor, para la ocasión, he elegido un vestido por encima de la rodilla, como requiere el protocolo, pero que es como una segunda piel y de un encaje muy fino, su escote solo deja ver la v que marcan mis huesos y que a muchos hombres les provoca, lo que tiene de cerrado por delante esta abierto en mi espalda terminando justo donde se puede ver el comienzo del pequeño hilo de mi tanga.
Observada saboreo mi copa que esta a punto de terminarse, cuando se presenta frente a mi un chico del que no me cave duda de que es a quien estoy esperando, imposible no reconocer esa mirada  junto con un guiño, que debe ser característico de la familia. Por lo demás no hubiera imaginado el parentesco. Es rubio, con el pelo muy corto y muy elegante vestido solo rompe este aspecto tan formal  un tatu que asoma por el cuello de su camisa.
Se sienta y pide otra consumición y con gran sorpresa a mi me deja frente a un botellín de agua.Le miro con asombro y dice: 
- tomalo entero con esto. Me ofrece una pequeña pastilla de color rosa con un corazón grabado y como siempre yo obedezco sin más.
No nos da tiempo ni a presentarnos casi, pues la función va a comenzar. Salimos corriendo cosa que no es fácil con la altura de mis tacones pero él me agarra fuertemente de la mano. Llegamos a tiempo..
- Tengo que ir al baño, le digo
-No ahora no. Aguanta o te perderás el comienzo.
 Estamos en un palco un poco más alto que el patio de butacas solo para nosotros, casi al lado del escenario.
Él se sienta un poco más atrás que yo pero muy juntos, suena el timbre y todo se oscurece por un momento, para dar paso al espectáculo.
Es una versión de Romeo y Julieta nueva, muy dulce y a la vez sensual que me engancha enseguida absorviendo toda mi atención.
Hasta que de pronto noto una mano que recorre mi espalda y hace que se despierten mis sentidos demasiado rápido, tendrá que ver con esa pastilla que he tomado sin preguntar ?
Mi temperatura con solo esos roces sube y sube Se acerca a mi oído y me susurra 
- Ponte de pie y poyate sobre el borde, con solo esto, ya estoy completamente húmeda.
Así lo hago y él sin más preámbulos me levanta el vestido hasta mi cintura  y  mete entre mis piernas su cabeza, su lengua sabe lo que hace y sus dientes más, no voy a poder estar callada, lo intento pero algún ruidillo sale de mi boca, lo que provoca miradas de las personas que están abajo sentadas. 
Cuando se levanta y me sujeta brutalmente por mis pechos y me enviste con su polla no lo puedo aguantar y  un gemido es escuchado por más de uno de los espectadores, que ahora no saben bien donde esta la función. 
Es impresionante, no he sentido nunca nada así, es como si todos mis sentidos se amplificaran, lo siento dentro , me quema, me golpea, e incluso me hace daño pero no quiero que pare.
De repente me dice:
 -  No querías ir al baño ? pues meate aquí ahora mientras yo me corro.
Así lo hago y él se va sobre mi con tal fuerza que creo que alguno más que yo se lleva una mancha para casa. 
Descansamos dos minutos y tras arreglarnos marchamos antes de que termine la obra.

Menuda sorpresa se van a llevar los empleados del teatro, allí han quedado nuestros jugos excepto los que  me he llevado yo en mi vestido.
Sasha.

1 comentario: